EL DEBATE SOBRE EL GASTO FARMACÉUTICO LLEGA AL NUEVO MODELO DE FINANCIACIÓN

Aunque la VI Conferencia de Presidentes ha abierto muchas puertas, el debate sobre la financiación autonómica será difícil, complejo y controvertido, especialmente en relación al gasto sanitario, el segundo componente del Estado del Bienestar que más preocupa a Moncloa tras las pensiones y uno de los primeros para las comunidades autónomas, si se tiene en cuenta que las pensiones son competencia estatal. Y dentro de él, la Farmacia se hizo un hueco en las ajetreadas horas vividas en el Senado el 17 de enero gracias a la propuesta de Castilla-La Mancha de definir una nueva política a nivel nacional. Dijo Emiliano García-Page que “o hay acuerdos en los medicamentos a dispensar en el conjunto de las autonomías, o quien decida unilateralmente tendrá que asumir ese gasto”. La discusión ya está servida, como muestran las diferentes posturas manifestadas por un grupo de comunidades consultadas por EG.

Entre las que abiertamente se adhieren a abrir el debate está Extremadura. Otras responden que ya existen órganos adecuados de participación para analizar las cuestiones relativas a la política farmacéutica, como la Comisión Permanente de Farmacia. Pero incluso desde este punto de vista se reconoce la necesidad de abordar cambios.

El País Vasco lleva tiempo reclamando su participación como miembro permanente de la Comisión Interministerial de Precios, así como que todas las cuestiones relacionadas con el proceso de financiación y fijación de precios de los medicamentos sean más transparentes y cuenten con un procedimiento que defina claramente los criterios a utilizar desde el punto de vista metodológico. “Lo que hace falta —matizan desde la Consejería de Sanidad— es una mayor voluntad política para que estos órganos funcionen adecuadamente, con reuniones periódicas y que, además, traten en profundidad y con el debate pertinente los temas que verdaderamente afectan a todos pero sobre todo a las comunidades autónomas, que somos quienes atendemos a los pacientes y financiamos el coste de sus tratamientos”.

También la Consejería de Sanidad de Murcia entiende que debe haber mayor participación de las comunidades, siendo recomendable a su juicio ampliar su numero hasta cuatro, como mínimo. Otro aspecto importante, para esta región, sería que la documentación aportada por las compañías para justificar el precio inicial propuesto sea “más transparente para los miembros de la Comisión Interministerial”.

Por último, tanto Murcia como País Vasco creen necesario que en cada procedimiento de fijación de precios se incluya toda la información que establece la legislación, esto es, análisis de coste-efectividad, análisis de impacto presupuestario, contribución al Producto Interior Bruto, grado de innovación e Informe de Posicionamiento Terapéutico, para de esta forma poder establecer un precio más acorde con la aportación clínica del medicamento evaluado.

Habiendo sido el principal impulsor del debate farmacéutico en el Senado, el presidente de Castilla-La Mancha no fue el único que puso el acento sobre el peso del gasto farmacéutico en la factura sanitaria, o sobre las previsiones futuras, que le convierten en el elemento más suceptible al descontrol autonómico. También el presidente de Extremadura y ex consejero de Sanidad, Guillermo Fernández Vara, apeló al grupo de expertos que deben trasladar su propuesta sobre el modelo de financiación a debatir sobre el clásico ‘yo invito y tú pagas’. “Si queremos seguir teniendo una sanidad puntera hay que invertir en ella. Si queremos seguir incorporando innovaciones hay que saber que eso cuesta dinero”, dijo.

El coste efectivo de los servicios

De partida, las comunidades autónomas creen que es un éxito que haya quedado para su estudio la propuesta de constituir en el nuevo modelo de financiación un bloque específico para Sanidad (cabría otro para Dependencia), y dentro de él un epígrafe sólo para el gasto farmacéutico. No es el único logro del que presumieron. La VI Conferencia de Presidentes ha conseguido por primera vez, y de manera eficaz, introducir un perímetro dentro del cual rediseñar el modelo financiero de las comunidades: el coste efectivo de los servicios.

Para los que llevan años discutiendo sobre el modelo, el cambio es trascendental. Castilla-La Mancha lo explicó mediante la hipótesis de qué ocurriría si fuera el Estado y no las comunidades quien gestionara la Sanidad y el resto de servicios públicos básicos. La Administración estaría obligada a prestar los servicios de manera homogénea en todo el Estado, con un coste resultante. “Ese es el coste que reclamamos; lo que le costaría al Estado mantener los servicios que las comunidades estamos manteniendo”, explicó García-Page.

Cuatro claves de la VI Conferencia de Presidentes

El futuro de la Conferencia

Unanimidad por parte de todos los asistentes. Esta Conferencia de Presidentes ha dejado a un lado los bandos ideológicos. Hubo controversias territoriales, por supuesto, pero nadie se comportó a la orden del partido. De hecho, no en todas las cosas estuvieron de acuerdo las comunidades autonómas gobernadas por el PP, ni las del PSOE. Para los presidentes, ha sido un punto de inflexión en sí misma... Una nueva forma de enfocar la agenda política en un escenario sin mayorías absolutas. La intención será celebrar cumbres al menos una vez cada año.

La reforma de la Financiación

No entraba en los planes del Ejecutivo el salir de la conferencia con el compromiso cerrado de disponer de un nuevo modelo de financiación autonómica en 2018. Pero así será. El primer paso será crear antes de un mes una comisión de expertos (integrada por los que se propongan por el Estado y uno por cada región y ciudad autónoma). Dada la especial importancia cualitativa y cuantitativa de las políticas de gasto sanitario dentro de las competencias autonómicas, el grupo de expertos actualizará las principales variables determinantes de su coste, evolución y su reflejo en el modelo propuesto.

Dependencia

España es, tras Japón, el país más longevo del mundo... Un motivo de orgullo que tiene como contrapartida las tasas de reposición, que en España no van al mismo ritmo que en Japón. Hasta ahora, los retos demográficos han sido objeto de múltiples foros territoriales; a partir de los compromisos adquiridos en la VI Conferencia de Presidentes pasará a ser una política de Estado, y tendrá su reflejo en el sistema de financiación... El cambio resulta vital para regiones como Asturias, con unas persepctivas dramáticas por el envejecimiento poblacional.

Sanidad

Junto con las pensiones, la Sanidad fue el reto del Estado del Bienestar más destacado por el presidente del Gobierno. Mariano Rajoy destacó que actualmente más del 70 por ciento del gasto público total va destinado a gasto social. Un 28 por ciento, concretamente, va a las pensiones, pero el siguiente componente en peso es la Sanidad, con un 14 por ciento. El Gobierno sigue confiando en que la mejor manera de garantizar el futuro es una política que genere empleo y, por tanto, nuevos recursos que poder repartir entre las comunidades autónomas.

Fuente: El Global