Acceso a las innovaciones o fijación de precios serán temas claves presentes en la agenda de la industria farmacéutica. José Ignacio Rodríguez Prado, socio responsable de Ciencias de la Salud de KPMG España tiene claro que las compañías tendrán que adaptarse al nuevo escenario.
Pregunta. ¿Cuál cree que será la evolución de la industria global durante este año?
Repuesta. Los grandes cambios en el mercado global modificarán la forma de hacer negocios. La respuesta a medio y largo plazo pasa por dirigir los recursos hacia la prevención. A corto plazo, el sector se verá cada vez más presionado para producir más por menos. Para las empresas las opciones están claras: o se enfrentan a una reducción de los precios o trabajan más estrechamente con sus clientes para lograr mejorar la salud a un coste más bajo. La evolución del sector a lo largo del 2017 viene marcada por la incertidumbre alrededor del acceso a las innovaciones, las nuevas terapias y la fijación de los precios, entre otros temas.
P. ¿Qué dirección cree que adoptarán las compañías?
R. En el pasado, el éxito económico se basaba en crear medicamentos superventas y venderlos en grandes cantidades. La dirección hacia la que se dirigen es el suministro de soluciones de servicios en torno a sus productos. Esto supondrá establecer más asociaciones y una colaboración más estrecha con todos los agentes.El mercado de los medicamentos se va a bifurcar. Una parte estará personalizada e irá dirigida a enfermedades que afectan a grupos pequeños de personas y, la otra se centrará en la prevención y en una amplia variedad de remedios, que incluyen nutracéuticos.
P. En lo súltimos años las adquisiciones y fusiones han sido la tónica general del sector¿Se mantendrá esta línea?
R. Se observa un gran dinamismo dirigido a la reorganización de los modelos de negocio para adaptarse a los cambios en el entorno de la salud y a los derivados de la rápida evolución tecnológica, donde los tratamientos son cada vez más personalizados y los métodos tradicionales de investigación y desarrollo y de fabricación en masa no están adaptados para afrontar este hecho. Una parte importante de la estrategia de crecimiento se ve reflejada en la elevada actividad de operaciones corporativas con un patrón común marcado por el acceso a nuevos mercados, liderazgo en nichos específicos y búsqueda de especialización y redimensionamiento de estructuras.
P. ¿Qué áreas son las más atractivas a la hora de plantear compras?
R. Las compañías han mantenido un compartimiento robusto durante 2016. A lo largo del 2017, la actividad de compras y fusiones en el sector se mantendrá moderadamente alta. Se espera un repunte en el número de transacciones donde las protagonistas serán las grandes farmacéuticas y las biotecnológicas principalmente en el área de la inmuno oncología junto con otras áreas terapéuticas como CART, NASH o terapias genéticas.
P. En Europa los problemas de acceso a las innovaciones ocupan el debate farmacéutico. ¿Qué cambios regulatorios se pueden producir?
R. Los acuerdos de riesgo compartido están suponiendo ya importantes mejoras pero sería recomendable algún tipo de regulación de requisitos mínimos exigibles. La estrategia de la Comisión Europea para 2020 establece la innovación como uno de los pilares del crecimiento. Estos objetivos implican la necesidad de que el Estado adopte varias medidas incluyendo, por ejemplo, replantear sus sistemas nacionales y regionales de I+D+i para estimular la excelencia y una especialización inteligente, potenciar proyectos de cooperación transfronteriza o ajustar los procedimientos nacionales de financiación. Este tipo de medidas también pasaría por la utilización de incentivos fiscales para promover mayores inversiones privadas en I+D+i.
P. Lo que está claro es que el debate de la bajada de precios está sobre la mesa.
R. Las fórmulas de riesgo compartido no parecen apropiadas para todo tipo de medicamentos, especialmente los de mayor consumo. La presión sobre los precios de estos últimos se podría incrementar a través de diferentes vías. La adaptación pendiente de las directivas europeas de contratación centra sus innovaciones en la implantación de sistemas de contratación eficientes y dinámicos. Esta eficiencia y dinamismo, que se observan claramente por ejemplo en la potenciación de las subastas electrónicas, los sistemas dinámicos de contratación o la confección de catálogos electrónicos, suelen descansar en una presión de la administración sobre los precios de sus proveedores.
Fuente: El Global