Entre los sectores que se van a ver afectados por la marcha del Reino Unido de la Unión Europea (el proceso conocido como Brexit) se encuentra el farmacéutico, y en este caso el divorcio puede tener profundas consecuencias para la salud pública y la sanidad del viejo continente.
En una carta enviada a los negociadores del Brexit, las principales patronales del medicamento y de la biotecnología de la UE y del Reino Unido (Efpia, Aesgp, EuropaBio, Medicines for Europe, ABPI, BGMA, BIA y PAGB) han dado la voz de alarma sobre los efectos nocivos que la separación puede tener para el entramado farmacéutico europeo, por lo que reclaman que este sector y su regulación se encuentren ya en la mesa de negociación como parte de una cooperación bilateral que en el futuro han de seguir manteniendo ambas partes.
Y es que aunque el cambio de ‘status quo’ va a tener inevitables consecuencias en el marco comercial, “hay que asegurarse de que lo haya ninguna interrupción en el acceso de los pacientes a los medicamentos”, indica la misiva, que llama a asegurar la “cooperación en la regulación de los medicamentos”. El texto indica: “nos gustaría explorar la posibilidad de que se mantengan estrechos vínculos entre los reguladores de la UE y del Reino Unido y que se comiencen de inmediato las discusiones para ello”.
Sin esta colaboración, el texto advierte de los números riesgos que van a existir para la seguridad del paciente y la salud pública. La red europea de farmacovigilancia perdería “capacidad y experiencia” lo cual tendría un inevitable impacto en “todos los sistemas que aseguran la seguridad y la eficacia de los medicamentos que se emplean para tratar a pacientes en la UE”.
De hecho, advierte de que si la separación se lleva a cabo de manera “desordenada” pueda generarse “una interrupción importante del suministro de la mayoría de las compañías, lo cual llevaría a un potencial interrupción del abastecimiento de medicamentos vitales”.
Periodo de implementación
Las patronales del medicamento reclaman, así mismo, que haya “un periodo de implementación” que se adecúe a las necesidades del sector farmacéuticos y biotecnológico para asegurar su actividad tras el 29 de marzo de 2019, fecha en la que tiene que haberse finiquitado el Brexit. El tiempo será necesario para que se solucione la disponibilidad de productos en todos los territorios, se solventen la posible necesidad de que tener que llevar a cabo nuevas solicitudes de comercialización para fármacos específicos o mudar a su personal.
Acceda a la carta
Fuente: Redacción Médica