Farmaindustria ha recordado que «la Medicina de Precisión no pone en riesgo el futuro del sistema sanitario en España», ya que los pacientes «tienen acceso hoy en España a una de las prestaciones farmacéuticas más amplias pese a que las inversiones en Sanidad Pública son inferiores a las de otros países europeos».
«España disfruta, desde hace décadas, de uno de los sistemas sanitarios más eficientes del mundo. Aunque resulta evidente que existen grandes áreas de mejora, en líneas generales, el modelo ha sabido adaptarse a las circunstancias cambiantes en un terreno tan dinámico como el de la asistencia sanitaria, incorporando las innovaciones de forma sostenible, hasta el punto de que los españoles disponen hoy de una de las prestaciones farmacéuticas más completas que existen», desarrolla la patronal de la industria farmacéutica.
Esto se debe, según Farmaindustria, a los «crecientes esfuerzos» de la industria farmacéutica en materia de I+D biomédica, desarrollados en un modelo abierto, en colaboración con hospitales, universidades y otros centros de investigación públicos y privados, que permiten «la aparición de nuevos medicamentos que han sido capaces, junto a otros adelantos en el terreno del diagnóstico y el tratamiento, de proporcionar importantes avances en materia de salud».
«Los nuevos medicamentos no solo están detrás de dos terceras partes de la mejora de la esperanza de vida de la población registrada en la primera década de este siglo, sino que también han hecho posible curar enfermedades con gran carga de morbimortalidad, como la hepatitis C, convertir en crónicas enfermedades antes mortales, como el VIH/sida, cambiar el pronóstico de las patologías reumatológicas o mejorar de forma sustancial las tasas de supervivencia de distintos tipos de cáncer», asegura esta patronal.
El avance de la Medicina de Precisión es «imparable», prosigue esta organización, y constituye ya cerca del 50 por ciento del total de los medicamentos en fase de I+D. Según distintos estudios internacionales, este tipo de tratamientos se incrementaron de forma exponencial en la última década, y está previsto que siga haciéndolo en los próximos años.
«Tampoco hay que olvidar la existencia de un amplio abanico de mecanismos que controlan que la inversión pública en medicamentos se mantenga dentro de márgenes razonables. El primero es que es la propia Administración quien fija el precio de los nuevos medicamentos en España, y lo establece teniendo en cuenta este control. Otro factor muy relevante es la expiración de las patentes de los medicamentos innovadores», describe Farmaindustria, así como el Convenio por la Sostenibilidad suscrito entre el Gobierno y la propia entidad y renovado recientemente para 2019.
«Todo ello configura una base sólida que asegura la sostenibilidad tanto presente como futura del sistema sanitario, que al igual que ha permitido a los pacientes acceder a las innovaciones en el pasado, incluso durante la larga crisis económica, lo seguirá haciendo en los próximos años con la colaboración de todos los agentes implicados», concluye esta organización.
Fuente: Acta Sanitaria