Las ventas del sector farmacéutico no terminan de estabilizarse en 2017, ni siquiera en el ámbito que mayores alegrías le ha dado a la industria española en tiempos de vacas flacas: las exportaciones. Si bien en mayo la facturación del medicamento made in Spain aumentó un 4 por ciento, en junio volvió a caer (situación que ya se registró en abril, con un descenso del 10 por ciento) a los ‘números rojos’ con un decrecimiento del 3,5 por ciento.
Así lo indica el último informe sobre comercio exterior elaborado por el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad, que indica que los laboratorios nacionales lograron en materia de exportaciones unos 913,5 millones de euros a las puertas del verano, una cifra que supone el 3,8 por ciento del total de las exportaciones de la industria española, aunque es una cantidad inferior a la alcanzada en el mismo periodo de 2016.
La principal caída de las ventas se produjo, “sobre todo”, en Estados Unidos, seguido por Alemania, Países Bajos y China.
Sin embargo, y a pesar del descenso, el cómputo global para la primera mitad de 2017 es positivo. Entre enero y junio las ventas en países extranjeros se saldaron con unos 5.532,7 millones, un 4,3 por ciento más que en 2016. Con todo, este ascenso se queda muy lejos del alcanzado por el cómputo global de la industria nacional, que fue del 10 por ciento.
Importaciones
Por otro lado, en junio las importaciones de medicamentos en España se redujeron unas dos décimas, quedándose en unos 1.135 millones de euros, dejando una reducción del 0,3 por ciento para el primer semestre del año.
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Fuente: Redacción Médica