Medicamentos (Foto. Freepik)
La industria biofarmacéutica pasó gran parte de 2023 preguntándose si la negativa de los inversores podría cambiar. Sin embargo, el sector ha tenido que enfrentarse a varios desafíos, como el impacto de la pandemia, la regulación de los precios de los medicamentos y la dependencia de proveedores externos, que hacen complicado el cambio de visión de los inversores.
Según el informe de Evaluate Omnium, hay razones para creer que 2024 será un año mejor, debido a que los tipos de interés mundiales habrán alcanzado su nivel máximo y empezarán a bajar. Esto significa que será más barato y fácil obtener financiación para el sector, lo que favorecerá su crecimiento y rentabilidad.
Sin embargo, ante estasprevisiones positivas, habrá que esperar a ver si son ciertas. Mientras los mercados financieros sigan inquietos, el listón permanecerá alto y solo se realizarán inversiones en aquellos proyectos considerados "éxitos evidentes". Asimismo, los expertos afirman que el entorno macroeconómico es precario y vulnerable a las crisis y que, por tanto, la recuperación será lenta y con sobresaltos.
LOS MAYORES APUESTAS DEL 2024
En este nuevo año, los avances en el tratamiento de la obesidad y las enfermedades relacionadas con esta patología seguirán siendo un tema importante para el sector biofarmacéutico. Las valoraciones positivas que ostentan actualmente empresas como Novo Nordisk, líder en este campo, se ven reforzadas por la creencia de que la clase de fármacos contribuirá a promover mejoras radicales en la salud de enormes franjas de la población.
Durante este 2024 habrá que estar pendiente de dos aspectos en este contexto. En primer lugar, si los fabricantes consiguen mantener el ritmo de la demanda y de los esfuerzos de estos a la hora de convencer a los pagadores de que los beneficios de sus nuevos medicamentos merecen la pena por su elevado coste. Detrás de estos fármacos metabólicos se esconden enormes expectativas no solo para este año, sino mucho más a largo plazo.
Por otro lado, Keytruda de MSD, que es un tipo de inmunoterapia contra el cáncer, también es uno de los fármacos de más rápido crecimiento del sector. Este se encuentra entre los diez más vendidos en este contexto, por lo que el éxito de este mecanismo inmuno-oncológico es evidente. Las previsiones apuntan a que Keytruda sea el fármaco más vendido del mundo en 2024, el segundo año en la primera posición para el anticuerpo monoclonal ampliamente utilizado.
Las previsiones apuntan a que Keytruda sea el fármaco más vendido del mundo en 2024
El auge del sector de la inmunología para el tratamiento de enfermedades como el asma, la psoriasis y la artritis reumatoide queda demostrado por las enormes y crecientes ventas. Asimismo, se prevé que la vacuna contra el VPH de MSD, que protege contra el cáncer de cuello de útero, supere la barrera de los 10.000 millones de dólares (9.122 millones de euros) en 2024, impulsada en parte por la creciente demanda en las regiones en desarrollo.
Por último, la entrada de Enhertu, un medicamento para el cáncer de Daiichi Sankyo y AstraZeneca, en la clasificación de fármacos de más rápido crecimiento refuerza la enorme expectación del uso de la tecnología anticuerpo-fármaco con la que fue desarrollado. Esta genera mucha expectativa debido a que puede mejorar el tratamiento del cáncer. Los resultados tan favorables han llevado a los analistas a pronosticar grandes resultados.
Se prevé que los pequeños desarrolladores ocupen un lugar destacado en la lista de los mayores lanzamientos potenciales
Cabe destacar que se prevé que los pequeños desarrolladores ocupen un lugar destacado en la lista de los mayores lanzamientospotenciales de fármacos, lo que indica que corren tiempos de nerviosismo para los inversores en biotecnología. Esto se debe a que la innovación y el potencial disruptivo de estas empresas pueden generar oportunidades de crecimiento significativas en un entorno de mercado dinámico y cambiante.
En cuanto a las expectativas de aprobaciones de nuevos tratamientos, Evaluate Omnium identifica 65 proyectos novedosos con altas probabilidades de recibir luz verde del influyente regulador estadounidense. Por lo tanto, se espera que en 2024 otra buena cosecha de aprobaciones.
Fuente: ConSalud.es