El uso de medicamentos a nivel mundial aumentó en 414.000 millones de dosis diarias definidas en los últimos cinco años. Se espera que crezca otros 400.000 millones hasta 2028, lo que significaría un 2,3 por ciento anual en los próximos cinco años. El informe ‘The Global U se of Medicines 2024: Outlook to 2028’, elaborado por la consultora IQVIA, prevé que el mayor incremento se dé en China, India y Asia-Pacífico. Por su parte, el menor crecimiento se dará en las regiones con mayores ingresos, como Estados Unidos, Europa Occidental y Japón.
El documento muestra que el crecimiento del volumen en América Latina se ha ralentizado considerablemente, pasando de una media quinquenal del 6,1 por ciento hasta 2023 a una media del 1,9 por ciento prevista hasta 2028. Esto se debe en gran medida al menor crecimiento económico previsto. Por su parte, en Europa del Este se mantiene sin cambios, con una previsión del 1,6 por ciento, un 0,1 por ciento menos que en los últimos cinco años, a pesar de las posibles repercusiones regionales de la guerra de Ucrania. Sin embargo, se espera que se recupere en 2024 y crezca por encima de la media mundial durante el periodo de previsión.
En términos generales, existe una correlación con el PIB per cápita, dándose un mayor uso de los medicamentos en los países de renta más alta como consecuencia de unos sistemas sanitarios más consolidados y un mayor acceso a los medicamentos. Otros factores son la carga de morbilidad a la que se enfrentan los pacientes y los aspectos del sistema sanitario a los que pueden acceder fácilmente para empezar a utilizar medicamentos para una enfermedad concreta.
Europa del Este tiene un consumo de medicamentos per cápita casi cuatro veces superior al de China, a pesar de que el PIB per cápita es aproximadamente un 50 por ciento mayor. Los países de África y Oriente Medio son los más rezagados en términos de uso per cápita, aunque algunos países de la región son valores atípicos significativos con un PIB y un uso robustos. Los países de renta baja tienen un acceso mucho menor a los medicamentos, que ha disminuido en los últimos cinco años. Se espera que se mantenga estable de cara a los siguientes cinco, contrarrestando potencialmente otras iniciativas políticas para mejorar la salud en esos países.
El informe señala que la pandemia, los conflictos regionales y los efectos de la economía mundial no han repercutido en el consumo per cápita, ya que en la mayoría de las regiones ha aumentado de forma constante. Sin embargo, sí se resalta que es más lento que en los últimos 10 años, a la vez que disminuye notablemente en Estados Unidos. "Es importante interpretar estas tendencias con cautela, ya que las enfermedades crónicas conllevan muchos días de terapia y los tratamientos para ellas suelen ser mucho menos comunes en los países de renta más baja", sostiene el documento de IQVIA.
En el informe también se muestra que el impacto de la pandemia en el uso de medicamentos ha sido muy variado, incluyendo repuntes en el uso de terapias para enfermedades crónicas. América Latina registró un crecimiento elevado del volumen en 2020, que se ralentizará con el tiempo, aunque se prevé que alcance el mayor índice de crecimiento hasta 2028. Los aumentos fueron impulsados por Brasil. "El crecimiento de Brasil se ha visto impulsado por un mayor uso de terapias predominantemente de bajo coste, pero se espera que cambie a terapias de mayor coste a medida que avance la previsión", dice el documento.
China, India y otros países asiáticos han registrado un crecimiento del volumen superior a la media y se espera que continúen así durante la previsión. "En los países de renta más alta de Norteamérica, Europa y Japón se espera una ligera mejora de las perspectivas de uso de medicamentos, aunque esencialmente continuando una tendencia constante típica de estos sistemas sanitarios más consolidados", concluye el informe de la consultora.
Fuente: El Global