PFIZER SE CORONA COMO REY MUNDIAL EN VENTAS DE LOS LABORATORIOS

Pfizer se corona como el rey mundial de los medicamentos. El fabricante estadounidense ha desbancado a sus rivales suizos Novartis y Roche, que presentó ayer resultados. Las tres grandes compañías del sector han presentado sus cuentas anuales de 2016 en la última semana, con grandes novedades respecto a 2015.

El gigante de Nueva York es el ejemplo perfecto de un sector farmacéutico que actualmente se encuentra en un ciclo permanente de fusiones y adquisiciones. La necesidad de crecer –llevando al mercado tratamientos innovadores– hace que las empresas se lancen a por carteras de productos, a por compañías muy punteras de biotecnología o a través de adquisiciones de empresas competidoras. El fabricante de Viagra, nacido en 1849, ha crecido de esta forma en las últimas décadas, con la absorción de Warner-Lambert (2000), Pharmacia (2003) y Wyeth (2009), entre otras muchas.

La compañía intentó también el pasado año la compra de Allergan, la que hubiera sido la mayor operación del sector por 150.000 millones. Pero fue frustrada por la Administración de Barack Obama al imponer nuevas normas que evitasen la marcha del gigante farmacéutico de Nueva York a Irlanda por motivos estrictamente fiscales. Ese movimiento hubiera reforzado a Pfizer como la mayor compañía farmacéutica del mundo con una capitalización bursátil de más de 280.000 millones.

Actualmente la capitalización de la empresa dirigida por Ian Read se sitúa en el entorno de los 178.000 millones. Además, cerró 2016 con un beneficio neto de 7.215 millones de dólares, un 4% más que el año anterior.

Su principal fármaco en ingresos es Lyrica, un medicamento contra la epilepsia, ansiedad y otras indicaciones neuropáticas, que reforzó los ingresos un 14%, hasta alcanzar los 4.165 millones. El área de terapias innovadoras (con patente) ejerció también de motor de la firma, con un incremento del 11% en las ventas.

El segundo lugar a nivel mundial lo ocupa el laboratorio suizo Roche, que también superó en 2016 a Novartis en ventas. La facturación de la multinacional helvética aumentó un 5% el año pasado, hasta 47.340 millones, según comunicó ayer el laboratorio. La división farmacéutica incrementó sus ventas un 3%, hasta alcanzar los 36.685 millones, impulsadas fundamentalmente por los antitumorales Perjeta y Herceptin, así como por Actemra, a pesar de que se vieron en parte contrarrestadas por el descenso en la facturación de Pegasys (para el tratamiento de la hepatitis), del medicamento oftalmológico Lucentis y del antienoplástico Tarceva. Por su parte, los ingresos de la división de diagnóstico creció un 7% hasta 10.790 millones.

Este laboratorio dirigido por Severin Schwan continúa siendo el mayor del mundo en capitalización bursátil, alcanzado un valor de alrededor de 192.000 millones.

Por su parte, las cuentas anuales de Novartis no han sido especialmente positivas. La cifra de negocio neta por operaciones corrientes alcanzó los 45.137 millones, un 2% menor, afectado en gran medida por la entrada de genéricos que compiten con su antitumoral Glivec. La compañía señala que espera un impacto positivo creciente en 2017 de su nuevo fármaco cardiológico Entresto. En Bolsa, cuenta con una valor cercano a los 178.000 millones.

Además, Novartis está barajando todas las posibilidades respecto a su negocio óptico Alcon, opciones que incluyen llevarlo a Bolsa como compañía independiente. La firma suiza está considerando escindir su división oftalmológica durante el transcurso de 2017 con el objetivo de maximizar el valor de la división, según informó la compañía la pasada semana. Novartis adquirió este negocio a Nestlé en 2010, pero no ha dado los resultados esperados. De hecho, el pasado año, Alcon dio pérdidas de 123 millones, según comunicó el laboratorio.