Sanofi y GSK han firmado un acuerdo de compra anticipada con la Comisión Europea para suministrar hasta 300 millones de dosis de la vacuna contra la COVID-19. Ambas corporaciones están trabajando conjuntamente en el desarrollo de la vacuna y, una vez sea aprobada, se efectuaría esta operación.
La vacuna que están desarrollando Sanofi y GSK está basada en una tecnología de proteínas recombinantes; esta ya la utiliza Sanofi en una de sus vacunas contra la gripe. Por otra parte, GSK es la encargada de ofrecer la tecnología adyuvante. Con este acuerdo se confirma el anuncio realizado a final de julio por parte de las dos empresas, y se marca un hito en la protección de la población europea contra la COVID-19.
Este contrato permitirá la compra de la vacuna por parte de todos los Estados miembro de la Unión Europea. También, la donación a países de ingresos medios y bajos.
Cabe destacar que la UE aportará una financiación inicial para apoyar la ampliación de la capacidad de producción de Sanofi y GSK en Europa. Así, el antígeno y las dosis finales de la vacuna se fabricarán en los centros de ambas compañías en Bélgica, Italia, Alemania y Francia.
Cristina Henríquez de Luna, presidenta y consejera delegada de GSK en España señala que “GSK tiene el compromiso, junto con Sanofi, de fabricar esta vacuna en Europa y de ponerla a disposición de los países europeos. Ambas compañías contamos con una importante capacidad de I+D y producción en Europa, respaldada con el acuerdo firmado hoy. En GSK España nos sentimos muy orgullosos de este logro. En las actuales circunstancias de pandemia nuestra misión de ayudar a que las personas puedan hacer más, sentirse mejor y vivir más tiempo se hace más presente e importante que nunca”.
Por su parte, Ignacio Saez-Torres, general manager de Sanofi Pasteur España, señala que “como compañía tenemos la misión de contribuir a controlar la pandemia de la COVID-19 y el cierre de este acuerdo para Europa significa un hito muy importante. Una vez se haya demostrado satisfactoriamente la seguridad y eficacia en los ensayos clínicos, esperamos que esta vacuna desempeñe un papel fundamental en la lucha global contra esta enfermedad y en la protección de la población. Tenemos el firme compromiso de proporcionar una vacuna que sea asequible y accesible para el mayor número de personas posibles; desde Sanofi España nos complace poder contribuir al esfuerzo de organizar y activar una solución de suministro para todo el continente”.
Desde Sanofi anunciaron el pasado 3 de septiembre el inicioo de los ensayos clínicos en fase 1/2. También, la previsión de comenzar la fase 3 a finales de 2020. Si estos tiempos se cumplen, ambas compañías consideran que la aprobación regulatoria podría solicitarse en la primera mitad de 2021. Además, y gracias en parte al acuerdo firmado con la CE, las dos compañías están ampliando
la capacidad de fabricación del antígeno y adyuvante para llegar a producir hasta mil millones de dosis al año. Con ello, contribuirían a satisfacer la elevada y urgente demanda de vacunas frente a la COVID-19 en todo el mundo.
El acuerdo con la CE no es el único que han firmado Sanofi y GSK en la lucha contra la COVID-19. Recientemente también han firmado acuerdos con Estados Unidos, país con el que mantienen una colaboración continuada desde hace años con la Autoridad de Investigación y Desarrollo Biomédico Avanzado (BARDA). Asimismo, otro de los acuerdos suscritos en esta línea ha sido con el gobierno de Reino Unido.
Por otra parte, ambas compañías planean proporcionar una parte significativa de su capacidad de suministro total mundial a la iniciativa mundial “Acelerador del acceso a las herramientas contra la COVID-19”, un proyecto en el que están implicados líderes de gobiernos, organizaciones de salud globales, empresas y organizaciones filantrópicas con el fin de acelerar el desarrollo, la producción y el acceso equitativo a las pruebas, tratamientos y vacunas frente a la COVID-19.
Fuente: El Global